9 de enero, 2025
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La Asociación de Industrias del metal y tecnologías asociadas de Galicia publica un interesante texto sobre la situación del sector en este año que acaba de comenzar.

El 2024 ha sido probablemente uno de los mejores años de la historia reciente de la industria gallega. El sector metal y sus tecnologías asociadas se encuentra en un buen momento, con una elevada carga de trabajo que roza el 95% de capacidad productiva ocupada.

Sin embargo, este también ha sido un año de sobresaltos en el panorama internacional. Los conflictos armados a las puertas de Europa, en Palestina y en Ucrania, se han recrudecido. A la vez, ha crecido la inestabilidad internacional, con grandes cambios políticos a nivel mundial que hacen tambalear el tablero de juego.

Pero a pesar de todo, 2024 ha traído avances importantes en diversos campos,  tecnológicos y sociales. Por eso, desde Asime miramos con optimismo hacia el 2025, un año en que esperamos seguir impulsando juntos un sector como la industria del metal y sus tecnologías asociadas, que es clave para la economía y el conjunto de la sociedad.

¿Qué desafíos nos depara este nuevo año? ¡Aquí van nuestros 5 retos para el 2025!

1. Crecimiento de la economía española

  • En España, los números son buenos. Se espera que nuestro país cierre este 2024 con un 3% de crecimiento, el cuádruple que la media de la Unión Europea, y que esta tendencia se mantenga en 2025 con un crecimiento del 2,5% en el PIB.
  • Esta buena evolución de nuestra economía es resultado de las mejoras de competitividad y también de la productividad, que ha mejorado en España casi un 3%.
  • Las políticas fiscales, que apoyan la demanda interna, y el incremento del número de afiliados son otra de las claves. En lo relativo a esto último, se espera que España alcance los 22 millones de afiliados el próximo año, motivado por la buena salud de la economía y sore todo por la incorporación o regularización de trabajadores migrantes, una demanda continuada de los sectores productivos como la industria.
  • La inflación parece que comenzará a moderarse, cerrando el 2024 en un 2,8% y bajando al 2,1% en 2025. Esto propiciará que los tipos de interés se mantengan en torno al 3%, una buena noticia para la población general pero también para las empresas, que comienzan a encontrar más facilidades de acceso a crédito.

Tareas pendientes

La nota negativa está en la tasa de paro juvenil, que sigue estando por encima del 26%, el doble que la media de la OCDE, a pesar de que se ha reducido en los últimos años.

Se espera que en 2025 se aprueben en España nuevas regulaciones de las que existe incertidumbre sobre cómo pueden afectar a las empresas: la posible reducción de la jornada, el estatuto del becario, los permisos climáticos, revisión de cuotas y bases de cotización de autónomos.

2. Inestabilidad internacional

Guerras

  • Los conflictos armados a las puertas de Europa se han recrudecido este año. En Ucrania se mantiene una guerra larga y enquistada, a la que se ha sumado la guerra de Israel en Palestina, que se ha extendido en la región, con el Líbano también pendiendo de un hilo en el conflicto. A la crisis humanitaria se suma la inestabilidad que esto genera en los mercados y cadenas de suministro, con mucha incertidumbre sobre cómo evolucionarán los conflictos el próximo año.
  • Estas mismas guerras han condicionado también la reciente caída del régimen sirio de Al Assad, abriendo un nuevo escenario para el polvorín de Oriente Próximo.
  • Pero los conflictos no se reducen a esta región, y es que hay ciertas tensiones sobre lo que pueda ocurrir en 2025 en otras zonas, como por ejemplo entre China y Estados Unidos en lo relativo a Taiwán.

Geopolítica

  • La desaceleración de China es otra de las claves que marcará el 2025. La segunda mayor economía mundial ha visto su crecimiento lastrado por una crisis inmobiliaria y un débil consumo doméstico, así como sus disputas comerciales con EEUU y con la UE por las políticas arancelarias sobre los vehículos eléctricos, baterías y paneles solares chinos en el primer caso, y sobre los vehículos eléctricos en el segundo.
  • La vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca también promete un 2025 convulso, sobre todo en lo relativo a su anunciada política arancelaria y posibles cambios en los pactos climáticos y de libre comercio a nivel mundial.
  • Así, el tablero geopolítico internacional se resquebraja, con países emergentes como India o Brasil, que aprovechan para ganar peso frente a las potencias tradicionales de EEUU y Europa. El reto para 2025: mantener la relevancia de la UE en un entorno internacional con competencia cada vez más feroz.
  • El reto es mayúsculo para Europa, especialmente porque sus grandes potencias están sumidas en crisis políticas internas. Las elecciones europeas de junio confirmaron un avance de la extrema derecha en Francia, Alemania, Bélgica, Austria, Países Bajos e Italia. Las consecuencias en los equilibrios parlamentarios no se han hecho esperar, especialmente en Francia (donde no parece que se consiga un gobierno estable para lo que le resta de mandato a Macron) y en Alemania (donde ya se han visto avocados a convocar elecciones en 2025).

3. Cambio climático

Reducción de emisiones

  • El año 2024 se cierra con la Cumbre por el Clima COP29, que, como todas las cumbres climáticas, deja siempre un poso de incertidumbre sobre lo que nos viene encima como planeta. Por un lado, se ha conseguido movilizar la financiación necesaria para que los países en desarrollo reduzcan sus emisiones y puedan adaptarse al cambio climático, y también se ha acordado avanzar en los mercados de carbono. Sin embargo, no se han acordado referencias al límite de 1,5°C ni a la eliminación progresiva de los combustibles fósiles, ámbitos que se plantean como un desafío crítico de cara a la COP30 en Brasil el próximo año.
  • El año 2024 nos ha dejado posiblemente una de las constataciones más amargas de lo que implica el cambio climático. La DANA que arrasó Valencia nos ha puesto de frente ante a una realidad que es ya presente y que urge, más que nunca, tomar medidas para atajarla. Porque las consecuencias sociales pueden ser devastadoras, pero también las económicas para todo el tejido industrial.

Impulso a renovables como la eólica marina

  • Para paliar estos impactos solo hay una opción viable: las energías renovables. Esto implica un cambio de paradigma global, que es solo comparable a la propia revolución industrial en su día. Debemos adaptar todos los sistemas productivos, electrificar vehículos, cambiar las cadenas de suministro, apostar por la fotovoltaica de autoconsumo en las empresas… pero en todo ello tenemos también una oportunidad sin precedentes, sobre todo para Galicia.
  • En Asime llevamos desde el año 2013 impulsando la eólica marina a través de nuestro Galician Offshore Energy Group. Nuestra industria cuenta con toda la capacidad para ser líder a nivel europeo y mundial en esta energía, desde la ingeniería y el desarrollo, pasando por la construcción de barcos de apoyo o la propia fabricación de eólicos y estructuras de cimentación fija y flotante. Ya lo estamos haciendo para promotores internacionales, ahora es el momento de explotar esta industria también en nuestras propias fronteras, con inversiones que puede generar hasta 9.000 nuevos empleos en 10 años y un efecto tractor en 200 empresas. Este es el camino irrenunciable hacia la descarbonización de nuestra economía.

4. Digitalización

Hacia la industria 5.0

  • La digitalización se ha acelerado en los últimos años. Las inversiones en digitalización no han hecho sino aumentar. Esto constata el cambio de paradigma al que nos enfrentamos, con una industria que camina ya hacia el 5.0 y que podría tener un impacto del 0,11% del PIB español en 2025, y del 0,36% en 2030(alrededor de 1.300 y 4.500 millones de euros, respectivamente).
  • Sin embargo, en este camino tenemos por delante el reto de que nadie se quede atrás, en la industria 3.0, y es que especialmente las pymes encuentran muchas veces dificultades para acometer estas transformaciones. Por ello, será fundamental que, desde las administraciones, en estrecha colaboración con la industria, se facilite por un lado la digitalización esencial de todas las empresas, a la vez que se sigue trabajando en el futuro con el despliegue de infraestructuras inteligentes basadas en el 5G, el IoT, la robótica o la analítica de datos.

Integrar la Inteligencia Artificial

  • En 2025 nuestra industria deberá comenzar a integrar de forma seria tecnologías como la Inteligencia Artificial, si no la realidad nos pasará por encima. El mayor reto en ese sentido es global, para llegar a regulaciones que permitan mantener la seguridad y la ética, sin menoscabar el desarrollo tecnológico, a la vez que hacemos un esfuerzo por que las pymes no se queden atrás.

5. Empleo y formación

Falta de profesionales

  • Nuestra pirámide poblacional juega en nuestra contra. El envejecimiento europeo es generalizado, pero en Galicia en concreto es una realidad acuciante. El 40% de los trabajadores de industrias clave como la naval se jubilarán en los próximos diez años.
  • El resultado de este reto ya lo estamos notando en nuestras empresas: Hoy se necesitan en Galicia, como mínimo, 5.000 personas para cubrir vacantes.
  • A esa pirámide poblacional invertida se suman también un sistema educativo y formativo que no termina de adecuarse a las demandas reales del mercado de trabajo.

Upskilling y formación continua

  • Por ello, este 2025 debemos seguir trabajando en la colaboración público-privada para formar profesionales y atraer talento al sector industrial, a la vez que buscamos fórmulas para flexibilizar la contratación de personas en otros países, tanto extranjeras como emigrantes gallegos que puedan estar interesados en retornar.
  • Este upskilling profesional masivo de la fuerza laboral del país es un enorme reto pero podría incrementar también un 6,7% del PIB en 2030 y generar 220.000 nuevos empleos.
  • Esta capacitación es un compromiso fundamental para Asime. Así, el próximo año 2025 ejecutaremos, en colaboración con diversas instituciones a nivel nacional y regional, más de 3 millones de euros en programas formativos, para intentar dar respuesta a las necesidades del sector.

6. Competitividad internacional

Medidas necesarias

  • Dados los retos que nos depara el año 2025, debemos potenciar nuestra competitividad para seguir trabajando en un entorno globalizado. Para ello, en colaboración con las administraciones públicas, debemos aspirar a simplificar la normativa y burocracia, apostar por inversiones que nos hagan autosuficientes en ámbitos estratégicos y también diversificar las cadenas de suministro.
  • El 2025 será también un año para apostar por nuevas actividades que pueden suponer un vector estratégico para nuestra industria, como es la seguridad y defensa. Estamos ante un incremento muy relevante de encargos, no solo de fragatas y vehículos especiales, sino también en lo relativo a la aeroespacial, sistemas de telecomunicaciones y comunicaciones satelitales. Unas 40 empresas ya trabajan en este vector, pero hay más de 200 empresas que pueden trabajar de forma protagonista en esta actividad.

Mercados exteriores

  • La previsible desaceleración de potencias económicas como China, unida al incremento de aranceles en EEUU y la inestabilidad a nivel internacional va a tener un impacto en nuestra industria, que es netamente exportadora.
  • Por ello, en 2025 tendremos que insistir mucho en diversificar hacia otros mercados. Esto es algo a lo que la industria gallega del metal está más que acostumbrada, y que le ha ayudado en buena medida a capear estos últimos años de inestabilidad. En el año 2025 debemos seguir reforzando esta diversificación incidiendo en la internacionalización. Por ello, desde Asime continuaremos haciendo una labor intensiva en materia de internacionalización, con especial foco en los países nórdicos para lo relativo a la eólica marina, Marruecos en lo relativo a automoción y naval-marítima, o EEUU, un mercado de difícil acceso, pero con cuya embajada hemos acordado ya 7 misiones comerciales para el próximo año.

Mindtech

  • Un evento clave en el calendario de 2025 será la 4ª edición de la feria Mindtech, organizada desde Asime para mostrar al mundo todo el potencial de la industria del metal y sus tecnologías asociadas en el Polo Ibérico. Del 17 al 19 de junio, el Ifevi acogerá este encuentro de referencia, que es eje de negocio intercontinental entre Europa, Asia y los países atlánticos.

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