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Forma parte del proyecto Cognirob, en el que colaboran Aldakin, el centro tecnológico Ideko, Estia y Dassault Aviación.
Lidia Iglesias, directora comercial e Ibai Inziarte, director de I+D, en las instalaciones de Aldakin. (Fuente: SPRI)
La empresa Aldakin ha inaugurado una nueva línea de negocio especializada en el mecanizado de composites gracias el diseño y desarrollo de un robot que actúa como sustituto de las fresadoras convencionales en la composición de piezas, y tiene la capacidad de succionar el polvo y las virutas generadas durante el proceso de fabricación.
La entidad, con sedes en Alsasua, Vitoria, Pamplona y Andoain, explica que la célula incorpora un sistema interno de aspiración de polvo y virutas, así como un sistema de mejora de la precisión mediante visión 6D, destinado a perfeccionar la exactitud dentro del volumen de trabajo. Además, se ha implementado un sistema para compensar las desviaciones del robot causadas por las fuerzas de corte, lo que contribuye a una mayor precisión durante el mecanizado.
Este robot forma parte del proyecto Cognirob, en el que colaboran Aldakin, el centro tecnológico Ideko, Estia y Dassault Aviación.
Desde la empresa destacan la importancia de esta nueva tecnología en la industria de fabricación de materiales compuestos, subrayando la preocupación por los riesgos para la salud derivados del polvo generado durante el mecanizado de dichos materiales.
El proyecto Cognirob refuerza las líneas de desarrollo del grupo Aldakin, mejorando las condiciones actuales del mecanizado y evitando problemas graves de salud asociados al proceso. El robot desarrollado es capaz de aspirar el 98% del polvo generado, logrando una impresionante precisión de +/- 0,15 mm, tres veces superior a la de los robots convencionales y superando los requisitos de tolerancia del sector aeroespacial.
La presentación de este proyecto representa un impulso significativo para la visión de Aldakin frente a los desafíos industriales.
Fundada en 1987, Aldakin destaca por su oferta diversificada de servicios industriales, que incluyen mantenimiento, instalaciones eléctricas, fabricación de armarios eléctricos e ingeniería. Con más de 200 empleados distribuidos en sus cuatro sedes, la empresa proyecta cerrar el año con ventas estimadas de 15,5 millones de euros, lo que representa un incremento del 13% y un aumento del 10% en la plantilla, confirmando así su positiva evolución.
