La recuperación de la actividad de la industria del metal de Bizkaia se ralentiza

Según este informe, la actividad en el tercer trimestre ha supuesto un frenazo en la tendencia de mejora que mantenía el sector, al incrementar en más de 7 puntos el número de empresas que dicen que han tenido una actividad inferior a lo previsto y reducirse de manera importante las que han tenido un nivel de actividad mejor de lo previsto.

En cuanto a la situación de la cartera de pedidos, se observa un incremento de las empresas que valoran su nivel de pedidos como débil o muy débil (41%) y un descenso de las que hablan de niveles altos o muy altos (una de cada 4). No obstante, estos datos son mejores que los que trasladaban las empresas antes de la crisis, a principios de 2020.

Sobre la facturación en este trimestre, y respecto a 2019, el 45% dice haberla disminuido mientras que el 35% dice que la ha incrementado.

Respecto a las previsiones de cara a fin de año, sigue aumentando el número de empresas que esperan recuperar cifras prepandemia, aunque aun hay un 15% que dicen que no alcanzarán un 50% de esa cantidad.

De acuerdo con los anteriores datos, podemos concluir que la recuperación está siendo un proceso complejo y que el camino sigue teniendo importantes obstáculos a los que las empresas deben enfrentarse antes de recuperar, de manera colectiva, niveles anteriores a la pandemia. En detalle, el 38% de las empresas dice que el plazo estimado para la recuperación de su actividad sigue siendo de un año o superior, o incluso no tienen perspectiva de recuperación.

En cuanto al empleo, el 9% de las empresas considera su plantilla insuficiente, hecho este que seguirá generando demanda de profesionales, pero se incrementa hasta el 19% las que dicen que tienen plantillas excesivas. La tendencia creciente desde hace un año en el número de empresas con niveles de plantilla adecuados se ha parado, mostrando un retroceso hasta datos de fin de 2020.

Las perspectivas en este ámbito son peores que las de 3 meses antes. Así, un 20% de las empresas piensan que aumentarán plantilla un 6,8%, mientras que un 12% dicen que la fvem.esreducirán un 14,2%. Esto nos lleva a concluir que en el último trimestre del año habrá una muy leve reducción de la plantilla respecto al tercer trimestre.

La mayor preocupación de las empresas actualmente es el abastecimiento e incremento de precios de las materias primas, factor este que se acrecienta en relación al trimestre anterior hasta alcanzar a 8 de cada 10 empresas. El segundo factor es la rentabilidad de las ventas, afectada por el coste de las materias primas, pero también por los costes de la electricidad, del gas, de los fletes…