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La LMM (Last Mile Management) es una aplicación que cumple con los estándares de la industria 4.0: optimizada, automatizada, inalámbrica e informatizada.
La industria se esfuerza cada vez más en optimizar sus procesos. La creciente demanda económica está forzando a las empresas hacia una producción más ajustada, más rápida y mejor. Los fabricantes de hoy en día se centran principalmente en la producción masiva hecha a la medida, la automatización en tiempo real y la transparencia total de los procesos.
En esta segunda edición de la Feria Advanced Factories, Bossard ha dado a conocer una metodología que eleva el abastecimiento en el lugar de trabajo al de los estándares de la Industria 4.0: optimizado, automatizado, inalámbrico e informatizado. La LMM (Last Mile Management) es una aplicación sencilla e intuitiva que se adapta a todas las empresas de fabricación industrial, incluso a las que no tenían en uso ninguna aplicación de la industria 4.0.
La LMM ayuda a optimizar el proceso desde los almacenes centrales hasta el taller de montaje. Normalmente, del rellenado de piezas B y C en el lugar de trabajo se encarga un especialista en logística interna, también llamado milkrunner. Las principales características de la LMM es que los pedidos se realizan de forma electrónica o a través de activación a demanda en el lugar de trabajo; es una aplicación digital, por tanto, informatizada; permite definir rutas personalizadas para cada cliente y de libre configuración; permite integrar artículos propios y piezas compradas, y por último, es una herramienta muy sencilla que requiere un mínimo esfuerzo.
En definitiva, la LMM ayuda al usuario a gestionar estos procesos de forma independiente y a optimizarlos a largo plazo para obtener mayor fiabilidad, un aumento de la eficiencia y más tiempo para las tareas esenciales.
En la edición anterior de la Feria Advanced Factories, Bossard ya presentó la “Smart Factory Logistics”, un sistema de gestión inteligente de abastecimiento, intuitivo y fácil de aplicar que está empezando a implementarse en fábricas españolas con gran aceptación. Consiste en la ordenación de todo el stock en estantes o palets numerados, cada uno de ellos con sensores de peso y conectividad de manera que se monitoriza en tiempo real las reservas de las piezas, se automatiza la gestión de los pedidos en base al uso real en producción y se garantiza el perfecto rendimiento de la cadena de suministro. Su gran utilidad es que permite optimizar la cadena de suministros, convirtiéndola en una producción ágil, productiva y fiable.