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El acuerdo del Consejo de la UE, en lugar de reforzar, debilita los instrumentos de defensa lo que impactará muy negativamente en la industria española y europea, que estarán menos protegidas ante el comercio desleal.
El Consejo de la Unión Europea acordó ayer, después de tres años de bloqueo, la reforma de los instrumentos de defensa comercial. Para Unesid, "lamentablemente, el acuerdo alcanzado no cumple el requisito de reforzar los mencionados instrumentos, sino todo lo contrario, anulará los esfuerzos realizados el último año en la relación con China, e impactará muy negativamente en la industria española".
Uno de los temas más controvertidos es la aplicación de la “regla del derecho inferior” (lesser duty rule), una rareza que utiliza casi en exclusiva la UE y que supone una defensa mucho menos efectiva que la que hacen otros países, en particular EE.UU., cuando las noticias que ha avanzado la nueva Administración Trump sugieren un aumento del proteccionismo comercial en dicho país.
La propuesta inicial de la Comisión Europea contemplaba que dicha regla dejaría de aplicarse en expedientes anti dumping cuando el país exportador impusiera distorsiones en los mercados de materias primas y energía. Desgraciadamente, el resultado alcanzado hace prácticamente inviable la no aplicación de la mencionada regla.
Andrés Barceló, director general de Unesdi mantiene que “este es un claro ejemplo de la táctica de la ranita; la presidencia eslovaca ha ido modificando su propuesta para contentar al denominado bloque nórdico hasta que la rana se ha cocido. Es incongruente que el Gobierno español haya apoyado esta propuesta que no va a suponer ninguna ventaja significativa para la industria europea y española”.
La cumbre europea había dado un mandato al Consejo para que reformase los instrumentos de defensa comercial de manera que fueran efectivos y potentes, actuando cuando se produjesen distorsiones de mercado. Sin embargo, debajo de una maraña de tecnicismos, la cruda realidad es que la industria española y la europea estarán menos protegidas ante el comercio desleal que la industria norteamericana, incluso antes de la toma de posesión del Presidente Trunp.
La mejora que se ha producido en el sistema de cálculo del objetivo de rentabilidad no compensa ni de lejos, el resto de los temas acordados.
Unesid espera que el Parlamento Europeo enmiende la propuesta y que los Jefes de Estado y de Gobierno entiendan que no todo vale. “En particular -según Andrés Barceló- esperamos que el Gobierno español rectifique su posición y demuestre, con hechos, su compromiso con la industria, el empleo y el crecimiento de nuestro país”.