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El centro tecnológico Tecnalia y la compañía Zerintia, especialistas en el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles y wearable, han firmado una alianza para desarrollar un proyecto que puede significar una auténtica revolución en la forma en que se puede trabajar en una fábrica.
Google Glass es un dispositivo “wearable” de realidad aumentada que la compañía estadounidense comenzó a desarrollar a mediados del año 2012. A pesar de su fama, no llevan mucho tiempo en el mercado: sólo se venden en Estados Unidos (desde abril de 2014) y en Reino Unido (desde el pasado 23 de junio). Eso no ha sido óbice para que investigadores y desarrolladores hayan estudiado las grandes posibilidades que un producto así puede tener, no sólo en el campo del ocio, si no en el terreno industrial.
Uno de ellos es Zerintia, empresa especializada en el desarrollo de aplicaciones para dispositivos, especialmente los denominados “wearable” (que se pueden llevar encima, como gafas, relojes, etc.), que se convirtió en Google Explorer con la intención de desarrollar aplicaciones y software con los dispositivos que el gigante de internet crea. Lleva más de un año con este proyecto de Google Glass.
Por otro lado, Tecnalia es el centro tecnológico privado más importante de España y uno de los mejor valorados del mundo. El objetivo de este centro es el de mejorar la eficiencia en la producción y fabricación industrial, para lo que cuentan con un equipo formado por más de 1.400 trabajadores, entre los que hay 200 doctores.
Ambas compañías unieron sus esfuerzos hace aproximadamente medio año con la intención de desarrollar aplicaciones industriales para las Google Glass. La idea es que mediante este novedoso dispositivo, todavía no está a la venta en España, el mismo concepto de fábrica se redefine gracias al uso de una herramienta que permite una mayor interacción con las máquinas en cualquier planta industrial.
Esta idea de unir tecnología puntera con la producción manufacturera es clave en lo que se ha denominado “fabricación del futuro”. David Sánchez Fuentes, director adjunto de Industria y Transporte de Tecnalia, explica que en esa fábrica del futuro (lo que en toda Europa se conoce como Industry 4.0, un programa que comenzó en Alemania) lo que va a cambiar radicalmente “es la nueva interacción de las personas y las fábricas, las personas y las máquinas, las personas y los sistemas de gestión de las compañías, y esta visión de la fábrica del futuro va a cambiar ese paradigma”.
Reconoce que “la fabricación del futuro es también del presente”, ya que, como avanzado centro tecnológico, “estamos desarrollando aplicaciones para determinados clientes” que se basan en esa visión de la fábrica del futuro.
Precisamente, este miércoles Tecnalia, junto a otras empresas y centros de investigación, presentará las últimas novedades tecnológicas relacionadas con la Fabricación Inteligente. La jornada, que lleva por título Basque Industry 4.0, contará con la participación y exhibición de innovaciones en los campos de fabricación aditiva, realidad aumentada, robótica colaborativa, sistemas ciberfísicos, cloud computing y big data.
No es la primera vez que dispositivos inteligentes como “smartphones” o “tablets” se utilizan en determinadas tareas industriales, pero la principal novedad que tienen las Google Glass frente a aquellos aparatos es que permite tener las manos libres. Además, ofrece soluciones tan ventajosas como la de no necesitar desplazarse a una fábrica que está a 10.000 kilómetros de distancia ya que, por ejemplo, lo que el operario de la planta en Rusia ve es lo mismo que va a ver el experto que se encuentra en España, y por medio de la voz y de la pantalla que tienen las Google Glass, le permite interactuar y ofrecer asistencia técnica o de otro tipo en caso de fallos en la máquina o robot sobre el que está actuando.
Las posibilidades que ofrece este dispositivo son múltiples, casi se podría decir que infinitas, ya que el software y las aplicaciones que lleven las Google Glass puede adaptarse a cualquier sector industrial o de servicios.
Así, Kepa Sagastabeitia, socio de Zerintia, expuso el caso de una compañía de logística de España cuyo director general quería proteger los empleos de la empresa. La mayoría eran trabajadores de baja cualificación, sobre todo, los relacionados con el almacenaje y mantenimiento. Zerintia estudió su caso y desarrolló un sistema, aplicado con las Google Glass, que ha permitido que la sede española de esa multinacional “sea la más productiva de todo el grupo a nivel mundial”. En el futuro, le servirá para seguir creciendo, sin perder esos puestos de trabajo, y como un ejemplo perfecto de lo que esta tecnología puede hacer por mejorar una empresa.
Sagastabeitia asegura que son pioneros en Europa: “Ahora mismo no hay otro país que nos supere en el desarrollo de esta tecnología. En Alemania no se está haciendo nada por encima de lo que estamos haciendo nosotros (en referencia a este proyecto común entre Tecnalia y Zerintia)”.
“Hay una serie de compañías, Zerintia entre ellas, que, sin estar el producto ni siquiera a la venta, ya estamos avanzando en la implementación de estos dispositivos en el ámbito empresarial. Donde más se está aplicando ahora mismo es en industria, logística y salud. Hay también algunos proyectos en sectores como los de banca y seguros. Además, son proyectos que no requieren de una gran inversión”, afirma Sagastabeitia.
Hasta la fecha, alrededor de una veintena de compañías españolas de diferentes sectores como seguros, infraestructuras, sanitario, logística y alimentación, están implementando las Google Glass dentro de sus fábricas.
Otro proyecto interesante es uno relacionado con Cruz Roja, y por el que también se ha interesado Samur, que integra Google Glass con drones. “En caso de un desastre natural, el dron es el primero que llega a la zona y con las Google Glass puedes ver lo mismo que ve el dron. Además, llevará una cámara térmica que identifica si hay una persona bajo tres metros de nieve. Tiene GPS y te va geoposicionando y te va a guiar hasta el lugar concreto donde se encuentra la persona. Los primeros que llegan no son médicos, son guardias civiles, y mientras preparan el rescate, están siendo asesorados por médicos a través de las Google Glass”, explica Sagastabeitia.
Al ser una tecnología innovadora y poco conocida, los responsables de Tecnalia y Zerintia trabajan estrechamente con el cliente para configurar unas aplicaciones específicas para lo que éste pide, de manera que cada proyecto es muy personalizado. En el futuro, la idea es crear soluciones verticales para los diferentes sectores industriales o de servicios.
Según Sagastabeitia: “Si aplicamos esta tecnología a determinados sectores, el salto de productividad, de eficiencia, en términos de seguridad laboral, es brutal”. Sólo queda decir: Are you ready for OK Glass?”.
Aquí puedes ver un vídeo en el que se explica este proyecto de Tecnalia y Zerintia: